Las recientes lluvias que han azotado la ciudad de León han sido como un bálsamo para los habitantes que durante la temporada de verano han soportado una intensa ola de calor con una extrema sensación térmica, dejando personas con problemas de salud.
Sin embargo los locales desean que las precipitaciones se den con regularidad y tienen la esperanza que estas lluvias traigan consigo alivio ante los efectos de las altas temperaturas, siendo León una de las ciudades más calientes de Nicaragua.
Al inicio de esta semana los leoneses presenciaron la primer lluvia más intensa en lo que va este año (2024), las calles se inundaron y los charcos se formaban en cada esquina emblemática de la bella ciudad.