Jerusalén, (EFE).
Al menos 90 gazatíes han muerto en la Franja de Gaza en las últimas 24 horas por bombardeos israelíes, y el total de víctimas mortales desde que empezó la guerra asciende a 30.410, según el Ministerio de Sanidad del enclave palestino, controlado por el grupo islamista Hamás.
“Todavía hay victimas bajo los escombros y en las carreteras, a los que la ocupación impide llegar hasta ellos a las ambulancias y equipos de rescate”, indicó un comunicado del Ministerio, que cifra en 7.000 los cuerpos sin rescatar, desaparecidos bajo los escombros.
Los heridos en la última jornada fueron 177, y desde el 7 de octubre suman 71.700, agregó.
El Ejército israelí informó este domingo de intensos ataques durante la noche y la madrugada contra “infraestructura y agentes terroristas” en el centro de la Franja de Gaza y en Jan Yunis, bastión de Hamás en el sur del enclave, donde la aviación destruyó “unos 50 objetivos terroristas en seis minutos”.
El Ministerio de Sanidad de Gaza informó anoche de que once ciudadanos murieron y otros cincuenta resultaron heridos, como resultado de un ataque israelí a tiendas de campaña de desplazados en el barrio de Tal al Sultan en Rafah y a una “reunión de ciudadanos junto a la puerta del hospital Emiratí”.
El Ejército israelí señaló que se trató de “un ataque de precisión” contra objetivos de la Yihad Islámica, que no causó daños al hospital.
Según datos de Hamás, del total de 30.400 víctimas mortales, más del 80 % son civiles, incluidos 13.200 menores.
Israel asegura que unos 12.000 son milicianos, pero Hamás rebaja esa cifra a la mitad.
El Ejército israelí anunció el sábado tres bajas más en sus filas, un total de 245 desde que comenzó la operación terrestre dentro del enclave.