La Paz, (EFE).
Una joven fallecida, dos desaparecidos, casas, calles y cultivos dañados son el saldo que han dejado las recientes lluvias en Bolivia y que provocaron el desbordamiento de ríos y derrumbes en al menos dos regiones.
El caso más reciente ocurrió este viernes en la zona de Llojeta, en la ciudad de La Paz, donde un muro de contención cayó sobre una vivienda, provocando la muerte de una joven de 21 años que se encontraba en una de las habitaciones, informó la Alcaldía paceña.
El alcalde de La Paz, Iván Arias, lamentó el deceso de la joven primero en Twitter y luego se trasladó hasta el lugar para verificar el alcance del derrumbe y escuchar algunas demandas de los vecinos.
Por su parte, el director de Atención de Emergencias del municipio, Vladimir Vargas, explicó que detrás del muro derrumbado había mucho lodo y humedad, lo que provocó que la base de la estructura se saturara y cediera.
“Es una mala conducción de aguas superficiales”, señaló el funcionario, citado en un boletín de prensa de la Alcaldía.
Obreros municipales trabajan desde la mañana en el lugar para limpiar la vivienda y retirar los escombros para luego apuntalar la construcción.
El municipio anunció que evaluará toda la estructura para verificar si hay riesgo de un nuevo derrumbe y se pueda evacuar preventivamente a sus habitantes.
La Alcaldía también atendió otro caso ocurrido durante la madrugada en la zona Los Rosales, donde una vivienda tuvo problemas estructurales y se procedió a una demolición controlada para evitar que afecte a las casas aledañas.
También en La Paz, la crecida del río Huayñajahuira provocó la caída de un muro lateral, por lo que se tuvo que cortar el paso en una avenida del barrio sureño de Calacoto.
Además, a causa de dos derrumbes que afectaron el cauce del río La Paz, el terreno del vivero municipal en el sur de la ciudad fue carcomido por las aguas, según informe del municipio.
EN CHUQUISACA
Las lluvias también ocasionaron en la víspera un deslizamiento en la comunidad de Tumpeca, a 40 kilómetros de Sucre, la capital constitucional de Bolivia y de la región de Chuquisaca, donde más de cinco viviendas quedaron enterradas, informó el Viceministerio de Defensa Civil.
La Gobernación de Chuquisaca tiene maquinaria pesada que ya opera en el lugar, mientras que el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, realizó un sobrevuelo en la zona.
“El informe preliminar nos dice que son 15 familias afectadas, diez hectáreas de cultivos con dañados de consideración, cuatro casas que ya no sirven para su recuperación y existen aparentemente dos personas desaparecidas, una persona adulta y una niña”, dijo Calvimontes a los medios.
La autoridad no descartó que hubiera más desaparecidos “porque estos eventos son de forma impredecible y encuentran a personas desprevenidas”.
El último informe brindado el martes por Defensa Civil da cuenta de 25 personas fallecidas y 150 rescatadas y evacuadas desde que comenzó la temporada de lluvias en noviembre pasado.
Según ese reporte, son 63.089 familias entre damnificadas y afectadas, 337.893 hectáreas de cultivos dañadas, el 80 % en la región oriental de Santa Cruz, 753 viviendas afectadas en distintos grados y 137 casas destruidas por completo.
Las afectaciones se presentan en 106 municipios en 8 de los 9 departamentos bolivianos, de los que 28 municipios declararon desastre y 5 están en emergencia, según Defensa Civil.